CHILE | II REGIÓN: 4 playas que no puedes dejar de visitar

Siempre viajar en avión al norte es más barato que hacerlo hacia el sur, así que decidimos agarrar la carpa, los sacos de dormir, los traje de baños y aventurarnos a la zona de Antofagasta.

Volamos en Sky y tratamos de hacer lo posible por no facturar (básicamente nos llevamos puesto lo que pudimos) a la ida lo logramos perfectamente, pero a la vuelta, nos pusieron problema y tuvimos que facturar la carpa. Esto es clásico de las aerolíneas y simplemente lo detesto. ¿Cómo es posible que te dejen pasar sin problema a la ida y al regreso te hagan pagar? No pue, si ya te dicen que tu equipaje cumple con los requisitos, uno se queda tranquilo; Pero no, tienen que esperar a que ya estés por embarcar para cobrarte el triple por un bolso que podrías haberlo facturado por Internet días antes a un costo mucho menor. En fin. Siempre digo: quedémonos con lo lindo. Total por una estadía de 3 – 4 días en la zona no me iba a calentar la cabeza.

Decidimos hacer una noche en un hotel rico al llegar a Antofagasta (no era de lujo, pero estaba bien, con linda vista al mar). Geohotel. Lo recomiendo, lo único fome y que realmente me molestó, porque yo amo tomar desayuno en hoteles (básicamente es mi parte favorita del día), es que cuando bajamos en la mañana nos dijeron que ya no servían más desayuno, ya que reponían solo hasta las 9.30 am (siendo que el día anterior nos repitieron varias veces que podíamos bajar hasta las 10am). Comprenderán que me transformé y cómo no eramos solo nosotros, si no que a varias familias les había ocurrido lo mismo, los aleoné hasta que nos dejaron pasar a comer, lamentablemente no era mucho lo que quedaba y la atención por parte del «administrador de cocina»fue pésima. Muy arrogante y prepotente. Más allá de eso, logramos agarrar algunas cositas y estuvo «bien».

Creo que si vas al norte es curioso conocer Antofagasta, ojo: uso el adjetivo «curioso» porque de linda la ciudad no tiene mucho. Es un puerto, bastante sucio (como todos los puertos de Chile) y muy seco. Eso sí, el mar se ve impresionante.

De todas maneras. vale la pena ir a la Portada de Antofagasta, además de que tiene un camino muy lindo que se puede hacer bordeando el mar y mirando muchas especies diferentes de animales. Nosotros vimos el amanecer allí: totalmente recomendado. Más aún, si tienes unos ricos sandwiches y un termito caliente.

Comenzamos nuestra aventura. Prendimos el maps y sin tener idea de nada de los alrededores de Antofa (excepto Hornitos, porque había oído muchísimo de ese lugar) manejamos hasta cansarnos.

HORNITOS (Mi playa favorita)

(video: rod@panoramicam.cl)

Me encanta Hornitos, definitivamente quiero regresar. Yo soy extremadamente friolenta y son contadas las veces que me he logrado meter al mar en Chile. Sin embargo, sentí que en Hornitos la temperatura del agua estaba exquisita y me pude bañar un largo rato sin problema. Y lo bueno, queda a aproximadamente una horita de Antofagasta.

Es muy curiosa la geografía de Hornitos. Rodeada de unas dunas enormes, literalmente estás en un «Hornito», pero no te preocupes que para pasar el calor del desierto tienes el tremendo mar de refresco.

No tengo claro si se puede hacer freecamping o no, sin embargo, habían algunos campistas instalados, y por lo que se veía, hace bastantes días.

Como ya saben, somos semi gitanos, así que andábamos con todo en el auto, lo único con lo que no contábamos era con comida ni instrumentos de cocina (no facturamos a la ida, así que íbamos lo más ligeros posible) . Así que, consejo: Si van a Hornitos, ya sea por el día o a acampar, lleven su cooler con comida (da mucha sed y calor), porque no hay donde comprar (y eso que fuimos en febrero: temporada alta).

La arena de la playa es muy rica porque es un poco más dura que la normal, y cuando sales del agua no se te pega tanto al cuerpo ni es rasposa. Por lo menos a mi me encanta eso.

Llegó la hora de almuerzo y no teníamos nada para picar a excepción de dos panes y una palta. Ahora viene la parte interesante.. ¿Cómo abrir la palta y ponerla en el pan sin tener cuchillo o cuchara? Pues, nada, obviamente nos lavamos bien las manitos en el mar (así aprovechamos de salar la palta jaja) y con la mano la untamos en los panes.

OJO: En el mar habían algunas medusas muertas (en Zapallar me toco una- ya muerta- y me dio bastante alergia, así que recomendación: igual poner atención dónde pisas o nadas).

PS: Hay casas que se arriendan (unas 5 casas en todo Hornitos) pero las vi en airbnb y bordeaban los $100.000 por noche, así que para mi gusto es rico ir por el día (o a hacer free camping)

Mejillones

Mejillones lo encontré considerablemente más lindo que Antofagasta. Es un pueblito, muy sencillo, pero igual tiene su gracia. El mar esta limpio y las edificaciones son más uniformes, lo que hace que se vea todo más ordenado.

El mar está mucho más frío que en Hornitos (de verdad Hornitos es como un micro clima) y andan muchos lobos marinos (están acostumbrados a la gente, pero igual hay que tener cuidado y respetar su espacio).

Para comer: nada sofisticado, pero hay picadas que venden cosas de mar y fritangas (lo típico).

Se nos hizo tarde así que nos quedamos alojar: Hotel Alto del Sol (hay dos, uno que se ve más pituco- pero estaba lleno- y otro más antiguo pero bien conservado, nos quedamos en el segundo).

Hotel Alto del Sol: No es un lujo, pero estábamos tan cansados que fue exquisito. Lo único malo, es que la pieza no tenía aire acondicionado y el ventilador era de esos manuales bastante arcaicos. Yo no tuve rollo porque soy friolenta, pero Javi se cagó de calor. Con respecto al desayuno: nos llevamos una grata sorpresa, estaba bien rico.

Les dejo su web: https://hotelaltodelsol.com/

Playa La Rinconada

La Rinconada viene segunda en la lista de las mejores playas cercanas a Antofagasta. Y lo mejor, queda a 10 minutos en auto desde Mejillones. Muy poca gente la conoce porque está poco señalizada, pero literalmente está al lado del camino que une mejillones con el resto de la carretera (y sale en maps) El agua un poco más calentita que en Mejillones mismo (siendo que es la misma playa que ven en la foto de arriba: pero tal como lo dice su nombre está «arinconada» entonces, supongo que al estar más protegida del viento puede que se sienta menos fría, creo yo).

No sé si es legal o no, pero hicimos free camping (al lado nuestro había una familia que parecía llevaba meses alojando en la playa), las estrellas se veían maravillosas, en la noche bajó bastante la temperatura (fuimos a fines de febrero) y el mar se oía revolverse con fuerza (Javi no pudo dormir mucho por los estruendos de las olas).

Playa Escondida

Entre cerros y dunas está escondida la playa. No es fácil llegar y si no tienes un 4×4 (como era nuestro caso) te recomiendo ir sólo si estás dispuesto a maltratar un poquito el auto y exigirle al límite. El camino desde Antofagasta es bueno . Lo único cuando estás por llegar no ves nada más que arena y dunas (obviamente deja de estar pavimentando) y el problema no es a la bajada, si no a la subida.

No está señalizado (pero llegas con el maps) así que tienes que ir jugando a adivinar un poco la entrada, pero hay muchas marcas de moto y auto entre las dunas (nuestro auto era bajito y no se quedó enterrado) que te guían a la playa escondida.

No puedes llegar con el auto hasta la playa misma, pero lo dejas en la duna y bajas a pie (está al lado). No hay nada en la playa, solamente una pequeña caleta de pescadores (una o dos casitas pequeñas).

Me quedé sola un momento entre las dunas (antes de llegar a la playa misma) y fue heavy… se sentía tan amplio y tan solitario, que te hacías pequeñito asfixiándote un poco en esa inmensidad. Fue rica la sensación, pero después de los 10 minutos ya quería juntarme con Javi otra vez.

Mirador de Punta Angamos

No es un balneario y tampoco se puede tocar el mar desde el Mirador de Punta Angamos; pero es majestuoso. Creo que si vas a Antofagasta o alrededores vale la pena visitarlo.

Desde aquí, puedes apreciar el lugar del Combate de Punta Angamos que sucedió durante la Guerra del Pacífico en 1879, donde la Escuadra chilena capturó al monitor Huáscar (nave de la Armada peruana).

¿Dónde se ubica? A 80 km. al norte de Antofagasta y a 15 km. de Mejillones.

Importante: Desde allí puedes ver varias concentraciones de lobos marinos, sin embargo te recomiendo devolverte por el mismo camino asfaltado por el que entraste y verás un pequeño letrero echo a mano que dice «loberias», es un camino de tierra bastante arcaico (pero tiene huellas de autos) que te lleva entre las dunas y acantilados: es un lugar solitario, hay algunas tomas por lo que obviamente es mejor bordearlas en auto e ir acompañada (o).

Ya una vez inmersa en el desierto (con los acantilados rodeándote) verás los lobos marinos en su hábitat natural (hay muchos) disfrutando de un buen bronceado en las rocas o nadando en el frío mar.

Una vez allí, vimos que el camino (las huellas) se extendían casi hasta topar con el mirador de Punta Angamos (aunque creo que no llega directamente), decidimos seguir y vimos que se podía bajar por el acantilado (era uno pequeño).

Yo, figuraba con unas chalas que me quedan bastante sueltas y un vestidito ligero, sin embargo, decidí apañar a Javi (porque nica me iba a quedar sola en esa extensa nada desértica) y bajar con él.

No había absolutamente nadie. Así que nos sacamos toda la ropa y nos metimos como Dios nos trajo al mundo. El agua estaba fría, pero bañarse en mitad del océano, en un acantilado, sin ropa era definitivamente una aventura.

OJO: El mar pega súper fuerte, así que si van con niños no sé si es muy recomendable, ya que apenas hay arena, es solo rocas.

De repente, la ola me tiró un poco más hacía la orilla, y al girarme para ver a Javi (que estaba un poco más adentrado en el mar), vimos unos pescadores saludándonos. Atiné a agacharme rápidamente y tratar de taparme con lo que podía Jajaja, cuando nos dimos cuenta que nuestra reacción había sido un poco inútil, corrimos los dos hacía la orilla a tratar de vestirnos. Los pescadores nos gritaban entre risas (aunque ni idea que nos decían) hasta que vieron que nos cagamos de vergüenza y se fueron solitos.

Cuando te devuelves desde Punta Angamo hacia la carretera principal te toparás con una bifurcación que la debes haber visto al pasar (bifurcación que te da la opción de tomar dos caminos: Punta Angamo y otro que no tiene letrero: pero que maps nos indicaba que llegaba a la playa).

Llegamos a una especie de playa llena de piedras (cero mi gusto) y había bastante gente acampando y carreteando. Lo rescatable, el color del mar era bastante transparente (pese a que parecía tener muchas algas). Pero nada más.

Al no ser nuestro estilo de playa, nos devolvimos a Mejillones y decidimos bañarnos en la playa del pueblo. Muy rica la verdad. Totalmente familiar y tranquilo, de echo nos dormimos una siesta de al menos 1 hora.

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